Today we would like to tell you a story about three little girls and a lovely fishing village.Meeting point was Benidorm Tram station. Time 3.55 pm.
We met our group there. They were 7 people. 4 adults and 3 girls; Nicola, Simon, Simone and David and three beautiful girls; Hanna, Amy and Mimi.
We were going to visit the tour called Lovely Fishing Villages. A tour visiting Villajoyosa, one of the most charming villages in the Costa Blanca, also known as “the jewel of the Mediterranean”. Villajoyosa means the Village of Joy and locals normally call it “La Vila”.
We took the tram and travel for about 20 minutes to our first stop: Costera Pastor. Before we got there, at one of the stops, another train was coming from the other side and stopped next to us. The other train started moving before we did and 5-year-old Amy said; “It feels like we are moving but we are not”. With that cute phrase we started our little adventure and we had a fun day out, full of interesting things and chocolate…
First stop was a chocolate factory called Chocolates Clavileño. A family-run chocolate factory that is one of the three remaining factories in Villajoyosa, there was a time when more than 150 families had their own little chocolate business.
The name Clavileño comes from a character of the famous book El Quijote, a wooden horse that could fly. There we went into the factory and saw all the machines and procedures to make chocolate.
We had the opportunity to try a bit of chocolate that was still not finished, this is why it tasted very bitter and the texture was quite granulated, so not very well refined.
We also saw how they did a new type of delicious chocolate with Maria biscuits (it is a very famous brand for biscuits in Spain). Then we went to the museum where you could see old tools used to make chocolate like manual stone millers, winnowers and other things.We had a taste of “chocolate granizado” or chocolate slush that was very, very nice. Also we had samples of various types of chocolate; hazelnuts bon-bons, pure dark and orange chocolate and the biscuits one. The three girls were delighted by all the sweets.
Our second stop was La Lonja de la Vila, or the Fish Market. We saw a live fish auction taking place and all the different types of fishing and species. Wholesalers have a quite funny way to buy fish. They need to press a remote control when they want to buy something. It looks like they are playing a video-game or something like it. It is very interesting to see how fresh fish looks like (unfortunately we are not used to it any more) and how much we should pay if we want to buy it really fresh.
On the way to the Market we saw BIG jellyfishes in the sea, next to the fishing boats and Hanna also saw a squid that had got inside a floating coca-cola can and had its legs hanging out. She asked in a very logical way; “mum, what is going to happen when it gets bigger?”
We stayed there for a little while and then moved to our third and last stop: Villajoyosa´s old city centre.
We went to the bridge first to see the coloured houses, the old medieval wall and the old flour mill that was right on the river bed. Then we went to the Asunción Church and saw this fortress like church built in the 16th century.
Strolling up and down La Vila´s old town is the thing to do, you can find so many beautiful corners full of character to take wonderful pictures and get the feel of an old Spanish coastal village with a past full of stories about pirates and battles.
We carried on down to the castle. This castle does not exist any more but you can find there a very nice replica of the village in the 16/17th century. There is also there a childrens park and guess who ended up playing in this playground: yes, the three little girls.
We finished our visit at the beache´s promenade, where we talked about pirates and the popular festival that takes place in Villajoyosa at the end of July: Los Moros y Cristianos. The third little girl, Mimi saw the beach and could not resist the temptation, they all three went running towards the water.
We had a fab afternoon out and we were pleased to meet these 2 wonderful families from Leeds, UK. Big thank you to all of you for coming to one of our tours and please keep in touch with Mandarinablue.
A special mention here to one person that came with us on this tour and I have not mentioned yet; my cousin Ana. She came with us to give me a hand and also she wanted to try this job to see if she would like to do it. She was fantastic and gave me a great help, so BIG thanks to Ana, and thanks also from the 2 families as they were VERY pleased to have you there with us and enjoyed very much your company.
And this is all for now, greetings from mandarinablue!
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Hoy os queremos contar una historia de tres pequeñas niñas y un pueblo pescador con encanto.
El punto de encuentro fue a las 3.55pm en la estación del TRAM de Benidorm.
Nos encontramos con el grupo allí. Eran 7 personas; 4 adultos y 3 niñas. Nicola, Simon, Simona y David y las tres peques Hanna, Amy y Mimi.
Nos disponíamos a comenzar el tour Pueblos Pescadores con Encanto. Un tour que visita el pueblo de Villajoyosa, uno de los pueblos con más encanto y más desconocidos de la Costa Blanca. Villajoyosa es en valenciano Vila Joiosa que significa “el pueblo alegre” o de la alegría. Los lugareños le suelen llamar La Vila.
Nos subimos en el Tram y viajamos durante unos 20 minutos hasta nuestra primera parada: Costera Pastor. Antes de llegar allí en una de las paradas anteriores estaba nuestro tren parado cuando llegó otro tren desde la otra dirección opuesta a nosotros y se paró al lado nuestro. Este tren comenzó a moverse antes de que lo hiciéramos nosotros y Amy, la peque de 5 años observó; “Parece que nos estamos moviendo pero no nos movemos”. Con esta frase tan tierna comenzamos nuestra pequeña aventura llena de visitas interesantes y chocolate…
Primera parada: la fábrica de Chocolates Clavileño. Una pequeña empresa familiar que es una de las 3 fábricas de chocolate que quedan en La Vila. En otros tiempos había más de 150 familias que se dedicaban a la fabricación del chocolate, pero eso eran otros tiempos…
El nombre de Clavileño viene de un personaje de El Quijote; un caballo de madera que podía volar. Una vez dentro de la fábrica vimos todas las máquinas y los procesos necesarios para hacer chocolate de una manera mecánica pero muy tradicional y con una supervisión manual continua.
Probamos un trozo de chocolate que no había sido terminado (antes de pasarlo por la conchadora) y fue muy curioso pues estaba bastante amargo y la textura era muy diferente a lo que estamos acostumbrados, más rugosa, como granulada, en definitiva no refinada. Fue curioso probarlo así, más “crudo” de lo habitual.
Después vimos también cómo hacían un tipo de chocolate nuevo; chocolate con leche y con galletas María. Después fuimos a la tienda-museo donde pudimos ver utensilios antiguos que se utilizaban para la producción y distribución del chocolate.
Probamos varios de los chocolates que tenían en la tienda; chocolate granizado muy, muy rico, chocolate puro con naranja, bolitas de chocolate negro con avellanas y también el nuevo de las galletas María. Las tres peques estaban encantadas con tanto dulce.
Nuestra segunda parada fue la Lonja de pescado. Vimos cómo llegaban los barcos a puerto, cómo descargaban las mercancías, cómo colocaban el pescado en la cinta mecánica y cómo lo subastaban en la lonja. El sistema de subasta es bastante curioso; los compradores tienen un mando a distancia que tienen que apretar cuando quieren comprar algo, si el precio les viene bien. El precio aparece en una pantalla, un sonido da comienzo a la subasta y el precio va desde lo más caro hasta cero en pocos segundos, ese es el tiempo que los mayoristas tienen para apretar su mando a distancia. Es como jugar a un video juego o algo así. Es muy interesante ver que especies traen a esta lonja, pues en cada lonja se pescan cosas distintas, qué pinta tiene el pescado recién cogido (pues ya no estamos acostumbrados a verlo tan a menudo) y cuánto nos costaría en lonja un kilo de sardinas o unos calamares.
De camino a la lonja vimos medusas en el mar, al lado de los barcos. Una de las pequeñas, Hanna, vió algo interesante; una sepia metida en un bote de coca-cola con las patas colgando hacia afuera. Entonces le preguntó a su madre; “mami, ¿qué es lo que va a pasar cuando la sepia crezca?”
Estuvimos merodeando la zona del puerto un poco hasta que nos fuimos a nuestra tercera y última parada: el casco antiguo de Villajoyosa.
Primero fuimos al puente principal para ver las famosas casas de colores, la muralla medieval y el antiguo molino harinero que estaba dentro del cauce del río Amadorio. A continuación visitamos la Iglesia fortaleza de la Asunción construida en el siglo XVI.
Pasear por las callejuelas de La Vila es una de las cosas que no te puedes perder al visitar este lugar. Perderse para encontrar bonitos rincones, con vistas estupendas, casas de colores y fotos increíbles.. sentir un poco la historia de este pueblo pescador con un pasado lleno de historias de piratas y batallas.
Continuamos hasta el castillo, a una explanada que han restaurado hace poco y que se sitúa encima de lo que antiguamente era el castillo fortaleza de La Vila. Ahora podemos disfrutar de las vistas desde ahí, además de ver una bonita maqueta de la ciudad en el siglo XVI. También hay un parque con columpios para los niños. Adivinar quién acabó jugando en ese parque sin prestar mucha atención a las historias del pasado; por supuesto, las tres niñas bonitas.
Acabamos la visita en el paseo de la playa hablando de piratas y corsarios y la famosa Fiesta de Moros y Cristianos de la Vila. Una de las peques, Mimi al ver la playa no pudo resistir la tentación y las tres salieron corriendo en dirección al mar.
Pasamos una tarde fabulosa y nos encantó conocer a estas dos familias de Leeds, en Reino Unido. Muchas gracias familias por venir a visitarnos y viajar con Mandarinablue, estamos en contacto.
Una mención especial a una persona que vino con nosotros en este viaje y de la que aún no os he hablado todavía; mi prima Ana. Ella vino a este tour para echarme una mano y también para probar a ver si este trabajo le podía gustar. Lo hizo fenomenal y me ayudó un montón, así que muchas gracias desde aquí Ana, también de parte de las dos familias que quedaron encantadas contigo.
Y esto es todo, un saludo de mandarinablue!
Para ver más fotos de esta excursión de medio día visitar nuestros álbumes en Picasa.
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